Aunque el término "Know Your Customer" no nos sugiera nada a la mayoría de nosotros, tiene un significado muy importante en el mundo de los negocios. El proceso de “Conoce a Tu Cliente”, también conocido por sus siglas en inglés KYC, es lo que realizan las entidades financieras para verificar la identidad de sus clientes en cumplimiento de exigencias legales como la cuarta Directiva europea contra el blanqueo de capitales.
Con los problemas relacionados con el fraude, la corrupción, el financiamiento del terrorismo y el blanqueo de capitales, las políticas de KYC se han convertido en una herramienta fundamental para combatir las transacciones ilegales en el campo de las finanzas internacionales.
Know Your Customer (KYC) como medida antifraude
Para el panorama financiero internacional el blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo son dos de las grandes amenazas a combatir. En Europa, la cuarta directiva Anti-Lavado de Dinero (AML4) entró en vigencia en junio de 2017, con un conjunto de normas para que las entidades financieras puedan protegerse contra estas amenazas.
Entre las nuevas obligaciones que introdujo esta Directiva AML encontramos el deber de controlar por parte de las instituciones financieras la identidad de los antiguos y futuros clientes -lo que entendemos por KYC- y compartir estos datos con la administración central.
Por un lado, deben llevar a cabo una identificación formal de los clientes mediante la presentación del DNI, pasaporte y NIE para los clientes extranjeros, así como del NIF. Y por otro lado, están obligados a la identificación real, es decir, conocer por ejemplo en todo momento quién es realmente la persona que abre una cuenta.
Pero con el uso cada vez más frecuente de Internet y las nuevas tecnologías para realizar consultas y transacciones financieras, esta identificación personal se ha tornado más como una de las medidas más efectivas para evitar el fraude online.
¿En qué consiste el procedimiento Know Your Customer?
Para cumplir con las regulaciones internacionales contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo, los procedimientos KYC deben implementarse en la primera etapa de cualquier relación comercial con un nuevo cliente.
El KYC comienza con la tarea de recopilación de datos personales para verificar que los clientes son quienes dicen ser. En el sector financiero, esto implica la verificación de su identidad a través de documentos, por ejemplo, el documento nacional de identidad.
Para algunas instituciones financieras, este proceso se sigue realizando de forma presencial y en papel, pero para otras como nosotros, ya se ha convertido en un trámite 100% digital, para reconocer al titular del documento.
En resumen se trata de un proceso de identificación del cliente que incluye la compilación y análisis de documentos de identificación, la verificación de los datos contrastándolos con bases de datos de terceros, la creación de una previsión del patrón de comportamiento del usuario y la monitorización de este comportamiento para ver si es coherente.
Conclusión
Las prácticas de Know Your Customer responden no solo a una necesidad de la entidad de saber quién es realmente su usuario por imperativos legales, es una manera eficaz de reducir el riesgo de fraude.
KYC permite a las compañías protegerse a sí mismas al garantizar que están haciendo negocios legalmente y con personas legítimas, y también protege a las personas que de otra manera podrían ser perjudicadas por el delito financiero.